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Reflections on my Trip to Peru

El 27 de febrero de 2020, salí de Miami para un viaje a Perú que me cambió la vida. Después de facilitar tres sesiones, mi ordenador se apagó y ya no pude entrar. Aunque tenía un Galaxy pad conmigo, tampoco parecía funcionar. El resto de nuestro grupo empezó a llegar a Lima y quedamos para cenar en Larcomar, un centro comercial situado frente a mi Airbnb. Antes de entrar al restaurante, escuché una voz muy fuerte y clara en mi cabeza que decía: "Tu vida nunca será la misma después de esto". 

Pasamos unos días en Lima recorriendo la ciudad juntos y estrechando lazos, y el 5 de marzo nos embarcamos en el avión con destino a Cuzco, que tiene una altitud de 11.152 pies. El Encuentro en Cusco tuvo lugar dos días después, con tiempo suficiente para aclimatarnos a la altitud. Antes del encuentro, tuve una reunión con Blair Styra que canaliza un espíritu llamado Tabaash. También trajo a través de otra entidad que me dijo que iba a morir en ese viaje y que me reencarnaría. Me sorprendió que fuera tan directo al respecto, pero lo acepté y estaba preparado.

El Encuentro fue una experiencia hermosa, que reunió a almas de todo el mundo para renacer juntas. Blair canalizó durante todo el evento y no pude evitar que se me saltaran las lágrimas cada vez que la otra entidad venía a dar sus enseñanzas. Muchos pudieron ver sus conmovedoras vidas pasadas durante un poderoso ejercicio y la regresión hipnótica de la tarde fue facilitada por mí y la entidad juntos, turnándose para profundizar y guiar al grupo. Fue muy bonito y sin fisuras.

Después del Encuentro, comenzamos nuestro tour de 5 días por Cusco, Valle Sagrado y Machu Picchu. Cada día, nos unimos más y nos convertimos en Uno con cada experiencia que tuvimos. Tuve una experiencia muy personal y profunda en la que sentí como si la vieja yo hubiera muerto y una nueva Alba hubiera renacido. Durante este viaje, fui capaz de aprovechar los recuerdos de las montañas (viendo a través de sus ojos) y mis manos se volvieron eléctricas, disparando ondas de energía que nunca antes había sentido. Otros empezaron a ver sus vidas pasadas en Perú y comenzaron a canalizar.

Experimentamos hermosas ceremonias, bendecidas por un chamán y maestros espirituales que caminaron con nosotros durante nuestro tiempo en Perú. Cada uno de nosotros experimentó una transformación y ahora se está adaptando a esta nueva paz interior. Nunca seremos los mismos.